Bien escrito. Legible pero largo. No sé a que viene el título del libro porque el personaje al que hace referencia aparece solo en 250 páginas de 1037, no lo entiendo.
Hasta lo que llevo vivido, si no me equivoco, los malos en los alzamientos son los que no acatan las reglas democráticas. Por lo tanto los que dan el golpe de estado, Franco y sus secuaces, se ha probado que eran los malos. El autor, a mi entender, se posiciona del lado del bando nacional poniendo como malos a los republicanos. El protagonista se ve obligado a ir a la guerra por una serie de circunstancias que el escritor justifica a lo largo de toda la novela. Eso da que pensar si eran experiencias familiares reflejadas en el texto como una vía de escape a sus pesadillas. Desde luego para el que no está de acuerdo con esas ideas se hace muy difícil la lectura y por supuesto no recomendable. En el último capítulo hay una reflexión del protagonista en la que no está seguro de quienes eran los buenos y los malos. Aquí se ve la mano del editor que aparte de publicar quiere vender. Utiliza la expresión “no me llega la camisa al cuerpo” sin ton ni son. La descripción de las batallas cansan.
Resumiendo: partidista, aburrida, a veces ñoña y encima te pone de mala leche.
LLÁMAME PAUL
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Creo que deberíamos atribuirle ya a *Víctor Matellano* el título del mejor
historiador sobre cine español de los últimos años.
Su labor, es encomiable,...
Hace 1 semana
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