San Miguel es uno de los iconos religiosos aceptados tanto por judíos, católicos y musulmanes. El arcángel es el jefe de todos los ejércitos divinos y en casi todos los países hay un templo dedicado a él. En Francia el lugar más emblemático es la Abadía de Mont Saint-Michel. El lugar es un pueblo autosuficiente creado a expensas de una abadía prerrománica, fortificada posteriormente, que tiene la cualidad de aislarse cuando sube la marea. El terreno que rodea a la abadía está protegido como parque natural y los turistas pasean por él tanto como por el peñón.
Cuando accedes a la fortaleza pasas por una puerta levadiza y te das cuenta de su independencia al ver un puesto de bomberos, una gendarmería, y multitud de locales que viven del turismo y la religión.
El acceso estos días es muy agobiante por la cantidad de visitantes, por lo que se agradece la llegada a la abadía y su visita. El recorrido es interesante desde el principio. Hay unas maquetas que explican la evolución de la abadía desde sus comienzos hasta la restauración del arcángel del pináculo en nuestros días.
En el claustro un niño se mete un talegazo descomunal por jugar entre las columnas del claustro y no me extraña nada porque ya llevaba un rato viendo a muchos niños haciendo lo mismo.
Dentro de la iglesia hay unos frailes rezando y la gente les hace fotos como si no hubiesen visto rezar a nadie en la vida.
De esta zona partimos a un lugar icono de batallas y luchas actuales, Normandía.
El GPS nos hace una ruta alternativa por unos caminos poco transitados y como sacados de las pelis de “Los chicos del maíz” o “Matanza en Texas”.
Nuestra visita empieza en el pueblo de Bayeux donde hay una bonita catedral, el cementerio británico, el memorial de los periodistas caídos ejerciendo su oficio, y el museo de la batalla de Normandía.
De allí nos dirigimos a dar unos apacibles paseos por los cementerios alemán y americano que están a unos 15 Km al Norte. Bajo el cementerio americano hay una playa extensísima en la que se llevó a cabo una parte del mayor despliegue militar jamás visto. Omaha Beach es ahora una playa donde la gente se baña y disfruta de las cometas, palas, cubos y rastrillos.
El desembarco no se podía llevar a cabo sin destruir antes las baterías antiaéreas de los alemanes. En Pointe du Hoc queda constancia de ello por la cantidad de cráteres y restos de hormigón de esas estructuras. El asalto fue llevado a cabo por Rangers americanos que escalaron las rocas para hacerse con los cañones. Esta acción se ha recreado en el videojuego “Call of Duty 2”.
En Longues Sur Mer en cambio se han conservado casi todos los cañones intactos y ahora el pueblecito recibe abundantes visitas por ello.
Continuará...
Cuando accedes a la fortaleza pasas por una puerta levadiza y te das cuenta de su independencia al ver un puesto de bomberos, una gendarmería, y multitud de locales que viven del turismo y la religión.
El acceso estos días es muy agobiante por la cantidad de visitantes, por lo que se agradece la llegada a la abadía y su visita. El recorrido es interesante desde el principio. Hay unas maquetas que explican la evolución de la abadía desde sus comienzos hasta la restauración del arcángel del pináculo en nuestros días.
En el claustro un niño se mete un talegazo descomunal por jugar entre las columnas del claustro y no me extraña nada porque ya llevaba un rato viendo a muchos niños haciendo lo mismo.
Dentro de la iglesia hay unos frailes rezando y la gente les hace fotos como si no hubiesen visto rezar a nadie en la vida.
De esta zona partimos a un lugar icono de batallas y luchas actuales, Normandía.
El GPS nos hace una ruta alternativa por unos caminos poco transitados y como sacados de las pelis de “Los chicos del maíz” o “Matanza en Texas”.
Nuestra visita empieza en el pueblo de Bayeux donde hay una bonita catedral, el cementerio británico, el memorial de los periodistas caídos ejerciendo su oficio, y el museo de la batalla de Normandía.
De allí nos dirigimos a dar unos apacibles paseos por los cementerios alemán y americano que están a unos 15 Km al Norte. Bajo el cementerio americano hay una playa extensísima en la que se llevó a cabo una parte del mayor despliegue militar jamás visto. Omaha Beach es ahora una playa donde la gente se baña y disfruta de las cometas, palas, cubos y rastrillos.
El desembarco no se podía llevar a cabo sin destruir antes las baterías antiaéreas de los alemanes. En Pointe du Hoc queda constancia de ello por la cantidad de cráteres y restos de hormigón de esas estructuras. El asalto fue llevado a cabo por Rangers americanos que escalaron las rocas para hacerse con los cañones. Esta acción se ha recreado en el videojuego “Call of Duty 2”.
En Longues Sur Mer en cambio se han conservado casi todos los cañones intactos y ahora el pueblecito recibe abundantes visitas por ello.
Continuará...